Para las mujeres japonesas, el problema de la limpieza de la piel es uno de los más importantes, pasan mucho tiempo en el proceso de maquillaje. Las recetas antiguas recomiendan el uso en el ritual de extracto de cereza y seda Koishimaru, según la leyenda, este dúo proporciona a la piel la eterna juventud.
La empresa Sensai ha demostrado en la práctica la efectividad del uso de estos componentes en cosméticos, y crea todos sus medios, siguiendo los preceptos de los sabios antiguos. Sin excepción, el bálsamo limpiador y la espuma facial se agregaron a la línea Sensai Silky Purifying .
Sakura, seda Koishimaru, extracto de kilaya, ginseng, kanzo, aqua-fitenzima, aceites de naranja y almendra humectan la piel, regulan el equilibrio hídrico, limpian la dermis del maquillaje, la suciedad y el sebo, mejoran la autocuración y energizan cada célula. El resultado después de la aplicación: la piel es más suave que la seda.