Akalifa (acalypha) pertenece a la familia de la euforbia. Estas plantas crecen en los trópicos y subtrópicos del sudeste de Asia, Australia, Polinesia, en la isla de Fiji.
En la floricultura de interior hay dos tipos: Akalifa Wilks y Akalifa de pelo erizado.
En la naturaleza, el acalife alcanza una altura de aproximadamente 3 m.
Akalifa es notable por sus brillantes inflorescencias colgantes de color rojo carmesí. Para flores inusuales se llama "cola de zorro". Las hojas pueden ser de color verde puro o con manchas de naranja y bronce, y también con flecos dorados dependiendo de la especie de la planta.
Para un buen crecimiento y floración, el acalif requiere mucha luz, calor y humedad. Proteja el acalife de corrientes de aire, no se recomienda sacarlo al aire libre.
Atención por favor! ¡Akalifa es una planta venenosa!
SECRETOS DE ÉXITO:
Suelo: crece bien y florece en una mezcla de tierra, hoja y césped. Algunos productores agregan una pequeña cantidad de estiércol cubierto de maleza.
Temperatura: contiene en invierno a una temperatura de no menos de 18 grados, en el verano 20-24 grados.
Iluminación: en el verano se mantienen en semi sombra, y desde julio a la luz solar abierta. Este régimen contribuye a la hermosa coloración de las hojas y templa la planta para el invierno.
Riego: en verano - abundante, en invierno - moderado. Para regar con agua suave y tibia. El suelo debe estar constantemente húmedo, pero la humedad no debe estancarse.
Humedad del aire: muy aficionado a la humedad, es necesario rociar regularmente.
Trasplante: en la primavera cada 2-3 años, por supuesto un buen drenaje.
Es mejor no transplantar plantas muy grandes, sino reemplazar la capa superior de tierra en una maceta. En primavera y verano, alimente una vez cada 2 semanas con fertilizantes minerales y orgánicos.
Reproducción: propagar en los esquejes de primavera. Los esquejes apicales se deben enraizar en el suelo, calentar a 20-22 ° C, cubrir con una película o un frasco de vidrio y poner en una habitación cálida. Los brotes jóvenes pellizcan, estimulando su ramificación.